El pequeño y mediano comercio de las Illes Balears está recuperando el pulso de forma lenta. Las ventas de los últimos meses mejoran las de 2012, mientras se ha incrementado ligeramente el empleo durante la campaña estival.
El mes de octubre se cerró con una subida interanual del 8,16% en el volumen de negocio, acumulando el séptimo mes consecutivo en positivo. A falta de los datos de los meses de noviembre y diciembre, todo parece indicar que 2013 será mejor que 2012, a pesar de que continúa descendiendo tanto el número de empresas como el de locales dedicados al comercio minorista.
La cifra de negocio se ha incrementado de manera constante desde abril, mientras que el número de afiliados a la Seguridad Social presenta un comportamiento irregular. En todo caso, se vislumbra ya en el horizonte la ansiada salida de la crisis.
En octubre, la subida interanual del volumen de ventas alcanzó el 8,16%. La evolución es muy positiva, tanto para el Institut Balear d’Estadística (Ibestat) como para el estudio que publica Pimeco Mallorca con carácter mensual.
Las ventas solo aumentaron en cinco comunidades autónomas en octubre, además de Balears, respecto al mismo mes del año anterior. Se trata de Canarias (4,6%), Navarra (3,8%), La Rioja (1,3%), Galicia (0,8%) y la Comunitat Valenciana (0,7%). Es decir, que Balears presenta los mejores resultados del Estado. La mejora de la cifra de negocio del comercio minorista no es aislada, un espejismo en un mar de pesimismo. El incremento es habitual en los últimos meses, pero no puede hablarse aún del adiós definitivo a la crisis. En todo caso, hace años que no se prolongaba durante tantos meses un aumento del gasto en comercios.
Dentro del sector del comercio minorista destaca que las ventas de los establecimientos de alimentación aumentaron un 8,9% en octubre respecto el mismo mes del año anterior. De esta forma, las ventas de este subsector enlazan diez meses en positivo, desde que se inició en enero de 2013.
La encuesta que elabora Pimeco Mallorca refleja un aumento de la facturación constante desde el pasado mes de abril. Destacan especialmente los datos de octubre, cuando el volumen de negocio alcanzó los 287 millones de euros. Un año antes había sido solo de 265 millones. Septiembre fue aún mejor, puesto que se alcanzaron los 302 millones, 26 más que en 2012.
AFILIACIÓN. Los datos de afiliación a la Seguridad Social en el sector comercio son irregulares. Así, en el mes de septiembre había un total de 51.591 trabajadores afiliados, mientras que un año antes eran 52.040. Son 449 personas menos, un 0,8%. Respecto a 2011, la mejoría es ligera, puesto que entones había 50.563 afiliados del sector comercio, 1.028 menos que en septiembre de este año.
Por islas, Mallorca es la que tuvo un mejor comportamiento de septiembre a septiembre, ya que la pérdida de afiliados fue solo de 214 trabajadores (-0,5%). En Menorca, el número de afiliados del sector comercio se redujo en 82 trabajadores (-2%). En Eivissa, se perdieron 120 afiliados (-1,8%), mientras que Formentera fue la peor parada, ya que los 33 trabajadores menos suponen un retroceso del 5,6%.
En cambio, durante el mes de agosto, en plena temporada turística, el número de trabajadores del sector aumentó en Balears respecto a 2012. Este año ha habido 54.881 afiliados, y en 2012, 53.504 (1.377 más, 2,5%). Además, las afiliacionesaumentaron en todas las islas.
NORMATIVA. La situación económica del Estado ha provocado la desaparición de multidud de pequeños comercios y la proliferación de locales comerciales, también de tamaño medio, vacíos. La aparición de grandes superficies es un problema más para los comercios tradicionales, de toda la vida, que han de apostar por la especialización, por la calidad y por el trato personalizado para garantizarse la supervivencia.
La Directiva Europea de Servicios del Mercado Interior (denominada Directiva Bolkestein) supuso la liberalización de servicios en la Unión. De esta manera, desaparecieron las normativas autonómicas y municipales que dificultaban la apertura de establecimientos comerciales de grandes dimensiones, protegiendo así el pequeño comercio. Fue el 1 de enero de 2010 cuando entró en vigor y en Balears supuso vía libre para la apertura de grandes superficies comerciales, que han ido minando al pequeño comercio.
Uno de los puntos de fricción entre el sector comercial y las administraciones públicas ha sido siempre la normativa horaria. La ley estatal de 2012 liberalizó la política comercial en el territorio nacional, ampliando el número de festivos de apertura de 8 a 16, aunque las comunidades autónomas podían limitarlos a un mínimo de 10. Además, la ley del Gobierno Rajoy ampliaba el horario de 72 a 90 horas de apertura semanal y fijaba unos criterios para las Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAT). En Balears, hasta entonces se podía abrir un máximo de 72 horas a la semana y ocho festivos al año. Además, las ZGAT estaban limitadas del 15 de marzo al 30 de octubre. La situación ha variado en muchos aspectos con la onda liberalizadora impulsada por Rajoy y secundada por Bauzá.
En Balears, hoy por hoy, los comercios pueden decidir libremente su horario, pero con un máximo de 90 horas semanales en días laborables. Como norma general, la actividad en domingo y festivos está prohibida, excepto los que han sido expresamente señalados por el Govern (diez cada año).
EXCEPCIONES. El Govern, con la única intención de favorecer a los pequeños comercios, ha regulado que los establecimientos con una superficie útil de exposición y venta inferior a 300 metros cuadrados tienen total libertad para decidir sus horarios de apertura y cierre, domingos y festivos. Podrán abrir siempre.
Otra importante excepción a la norma general son las denominadas Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAF). Se trata de lugares en los que, en definitiva, los comercios pueden abrir domingos y festivos. El Govern autoriza siempre las ZGAF a instancias de los ayuntamientos, que deben solicitarlo mediante un acuerdo del plenario.
De esta forma, por ejemplo, Palma dispone de varias ZGAF, una de las cuales queda delimitada por el mar y las avenidas. Es decir, todo el casco antiguo de la ciudad. Así, los grandes establecimientos comerciales situados en Jaume III o el Born pueden abrir sus puertas en domingos y festivos.
Los ayuntamientos de Mallorca han optado por diferentes opciones. Por ejemplo, Alcúdia, Andratx, Banyalbufar, Bunyola, Campos, Capdepera, Esporles, Estellencs, Fornalutx, Inca… tienen declarada ZGAF la totalidad de la superficie del término municipal. Otros ayuntamientos mallorquines, en cambio, han optado por solo declarar ZGAF algunas zonas concretas. En Menorca, los ocho ayuntamientos existentes han declarado ZGAF la totalidad de su superficie. De esta manera, en cualquier punto de Menorca pueden abrir los comercios domingos y festivos.
En Eivissa, en Vila, la ZGAF es el núcleo antiguo y el paseo marítimo, además de Platja d’en Bossa y Talamanca, con la excepción de la zona destinada a usos industriales. Sant Antoni es ZGAF todo el municipio y Sant Joan de Labritja y Santa Eulària del Riu han optado por declarar todo el término ZGAF, excluyendo las zonas industriales.
La polémica respecto las Zonas de Gran Afluencia Turística está vigente hoy en día. El Ajuntament de Marratxí aprobó el pasado 29 de octubre la declaración de todo el territorio como ZGAF. Es obvio que se trata de una medida encaminada a facilitar que todos los establecimientos comerciales de gran tamaño existentes en el municipio puedan abrir sin limitaciones domingos y fiestas. De hecho, es evidente que Marratxí no es un municipio de carácter turístico y por tanto no han tardado en aparecer voces que catalogan de perversión el uso que está haciendo el Govern de las zonas ZGAF.