El president del Govern, Francesc Antich, anunció ayer que el
Ejecutivo reestructurará tanto el organigrama como los trabajos del
Institut Balear de la Vivenda (Ibavi), con el fin de que cumpla las
funciones sociales para las que está concebido. El president
anunció que el Govern contempla la posibilidad de construir
residencias para jóvenes, que serían pequeños apartamentos con
servicios comunes e instalaciones deportivas.
Con estas residencias, que imitarían las de estudiantes, se
pretende que los jóvenes tengan puedan independizarse sin tener que
recurrir a los alquileres a precio de mercado ni tener que comprar
su primera vivienda. Esta misma filosofía se aplicará para la
tercera edad, con vivienda tuteladas como ya ha puesto en marcha el
Patronat Municipal de l’Habitatge.
Sobre la reestructuración interna del Ibavi, el president
explicó que el Consell de Govern ha renovado a todo el Consejo de
Administración. Antich informó de que el nuevo Govern ha detectado
un déficit de 1.000 millones de pesetas, de los que el 80 por
ciento, unos 800 millones, se deben a morosidad de los
beneficiarios. El president aseguró que, en otras comunidades, la
morosidad ronda el 20 por ciento.
En paralelo a esta modificación orgánica del Ibavi, el president
anunció la puesta en marcha de una política de adquisición de suelo
en coordinación con los ayuntamientos de las Islas.
Por otra parte, Francesc Antich anunció su intención de convocar
la próxima semana una reunión con los responsables del Consell y
del Ajuntament de Palma para tratar de resolver de una vez por
todas el problema de las basuras. «En este asunto ha reinado un
caos absoluto y de una vez por todas hay que coger el toro por los
cuernos», señaló.