El Govern que preside José Ramón Bauzá logra un aprobado raspado en la valoración que hacen los ciudadanos de Balears de la gestión realizada durante sus primeros cien días. Esta es una de las principales conclusiones de la encuesta realizada en exclusiva para Ultima Hora por el Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES).
La nota media alcanzada por el Govern es de un 5,3 que logra sus principales apoyos entre los votantes del Partido Popular, con un sentimiento ‘españolista’ y mayor de 65 años. Por el contrario, los grupos más reaciones a la gestión gubernamental corresponde a los electores que se declaran socialistas y nacionalistas, así como a los más jóvenes de la sociedad, entre los 17 y los 30 años. Estos son los dos perfiles que se enfrentan en el seno de la sociedad balear a la hora de valorar el trabajo realizado por el equipo de José Ramón Bauzá cuando se cumple el primer trimestre de la legislatura que se prolongará hasta el próximo 2014.
Lo bueno y lo malo
El sondeo del IBES determina el paquete de medidas que los ciudadanos han acogido con satisfacción o ha valorado de manera positiva. En primer lugar figuran los recortes innecesarios, es decir, la apuesta por la austeridad. En este misma línea hay que señalar la disminución de los cargos políticos y de organismos públicos que se consideran innecesarios.
También se entiende como positivo la equiparación del castellano y catalán, una de las decisiones más polémicas dentro de los primeros días del Govern, la reactivación del turismo y la promesa de una mayor transparencia en las cuentas públicas son medidas que cuentan con el agrado de los ciudadanos de las Islas.
En el campo contrario, la paralización de nuevas contrataciones laborales, el restraso en el abono de las facturas pendientes y las reducción de las subvenciones son aspectos que restan puntos en la valoración global del Govern.
Donde la izquierda y los sindicatos parece que está haciendo mella en el Govern es en los mensajes del recorte de prestaciones sanitarias y educativas, terreno en el que la sociedad balear se muestra sensible. Tampoco puede pasar desapercibido un aspecto que se considera capital en Menorca y Eivissa: el transporte interinsular. Sobre este problema el Govern apenas se ha pronunciado y sobre el que se mantiene la reivindicación de menorquines e ibicencos como una cuestión pendiente.
Más confianza
El president Bauzá y su Govern, claro vencedor de las pasadas elecciones autonómicas del pasado 22 de mayo, ha generado una clara corriente de confianza respecto al anterior gobierno del Pacte que presidía el socialista Francesc Antich.
Las diferencias en este sentido son abismales, un 77 por ciento se muestra más confiando en el Govern de Bauzá que en el de Antich. Pero hay algún matiz.
Cuando se trata de evaluar la confianza en Bauzá para salir de la crisis, en principal problema que acucia a la sociedad balear, las diferencias se recortan. Un 56 por ciento confía en el Govern conservador de Bauzá frente a un 45 por ciento que no cree que desde el Consolat de la Mar se pueda sacar a las Islas de la recesión actual.
El convencimiento de que las noticias adversas en el ámbito nacional e internacional supera las competencias del Govern es determinante para esa opinión distante sobre las posibilidades reales de Bauzá para sacar a Balears de la crisis, una opinión que se avala con el panorama interno de recortes presupuestarios en casi todos los frentes de la Administración y que también acabarán repercutiendo en el conjunto de la economía balear.
De todos modos, la salida de Antich se considera un alivio tras una etapa de escasos logros sociales y económicos, además de una convulsa vida política protagonizada por sus socios políticos.